jueves, 28 de enero de 2016

Pruebas científicas de la sábana santa.

SABANA SANTA:
Estudios Científicos
Estudios científicos favorables a la autenticidad:
No es un secreto que los enemigos de la fe se enfurecen contra las pruebas favorables a la autenticidad y han creado numerosas publicaciones tratando de desacreditar con toda clase de mentiras la impecable evidencia que no pueden rebatir con la razón. Por ejemplo algunos siguen diciendo que la sangre no es mas que pintura medieval, que el rostro de Cristo está inspirado en las pinturas góticas, etc.
Observemos la evidencia:
La Sorpresa de la Fotografía
El 28 de mayo de 1898, Secondo Pía, al hacer las primeras fotografías de la Sábana Santa tuvo una gran sorpresa en el cuarto oscuro: La imagen en negativo apareció majestuosamente como una imagen en positivo con extraordinaria claridad y detalle. Así se dio cuenta de que la imagen representada en la tela constituye un auténtico negativo. Es evidente que un plagio medieval no podía prever la fotografía. Simplemente no se conoce en la historia de la iconografía anterior al siglo XX, de ningún otro caso una imagen que sea un negativo.
Científicamente se ha podido comprobar:
Expertos de la NASA en 1977, utilizando un ordenador descubrieron que la imagen tiene propiedades tridimensionales, que no pertenecen ni a las pinturas ni a las fotografías.
En 1978 la Iglesia permitió a un equipo internacional de mas de dos docenas de eminentes científicos investigar el Lienzo. Los análisis fueron extensos, envolviendo diversos métodos desde rayos x, microscopía hasta análisis químicos. He aquí algunos de los resultados mas sorprendentes:
Los estudios del tejido sitúa su procedencia en el área sirio-palestina en el siglo I.
En 1978, el biólogo y criminólogo suizo Max Frei Sulzer del Centro Internacional de Sindonología, tomó muestras del polvo de la Sábana. y pudo comprobar la existencia de polen de flores de Palestina. También se ha encontrado áloe y mirra como la que utilizaban en el medio oriente los judíos para preparar los cadáveres. El falsificador medieval hubiera tenido que adelantarse a la invención del microscopio para añadir elementos invisibles al ojo humano: polen, tierra, suero, aromas para la sepultura...
Sobre los ojos hay huellas de monedas acuñadas en el año 29 D.C. bajo Poncio Pilato. Esto corresponde a la costumbre de la época de Jesús de poner las monedas para mantener los párpados cerrados. Fueron descubiertas en 1954 y en 1978 reconocidas en mayor detalle.
Los análisis de las huellas de sangre, hechos en el 1978 por Pierluigi Baima Bollone y otros, han indicado la presencia de sangre humana, del tipo AB. Estudios del grupo STURP uso espectroscopia , florescencia de rayos x y rayos ultravioletas, termografía y radiografía y otros mecanismos sofisticados para comprobar la presencia de la sangre
La sangre es sangre de un hombre que padeció una muerte traumática" asegura el químico Alan Adler quien además asegura que tanto los análisis químicos como la florescencia amarillo-verdosa visible bajo luz fluorescente, indican la presencia de flujos de sangre. Esta sustancia era desconocida hasta el siglo XX, por lo que no puede ser la obra de un artista medieval. Adler piensa que la imagen fue producida por algún proceso de radiación.
La Imagen: No existen indicios del uso de brochas en la imagen. No se utilizó ninguno de los métodos artísticos conocidos para hacer la imagen. La imagen tiene slo una fibra de profundidad
El mismo grupo de científicos de STURP, comprobaron la absoluta ausencia de pigmentos, tintas u otros medios de pintura en la Sábana Santa. No hay imagen del cuerpo bajo las manchas de sangre. Por lo tanto, la imagen se formó después de las manchas de sangre. La imagen del cuerpo del Hombre de la Sábana no está hecha manualmente: no es una pintura, ni una quemadura (las quemaduras existentes no son parte de la imagen sino que fueron causadas por un incendio en 1532). El origen de la misma es un enigma científico que todavía no se ha resuelto. No se conocen los mecanismos físico-químicos que han producido esta oxidación y deshidratación de las fibras más superficiales del tejido. Sobre la Sábana no hay huellas de pigmentos colorantes. La imagen es el resultado de deshidratación y oxidación de la celulosa contenida en las fibras en la superficie de la tela. Pero cómo se formó es aun un misterio.
Desde el campo de la medicina: La imagen que aparece en negativo permite un minucioso estudios anatómico y de las diferentes heridas que aparecen en le cuerpo. El primer cirujano que comprobó la absoluta exactitud anatómica de esas heridas fue el profesor de Anatomía Comparada de la Sorbona, Yves Delage, de la Academia de Ciencias de París. Este profesor era agnóstico, sin embargo no le quedó la menor duda de que sólo un hombre que hubiera padecido los tormentos físicos de Jesús podría haber dejado tales huellas.
Una multitud de médicos han podido confirmar los hallazgos del Doctor Delage. Pierre Barbet (cirujano del Hospital de S. José de París), Giovanni Judica Cordiglia (profesor de Medicina Legal de la universidad de Milán), Dr. Roberto Bucklin (medico forense, patólogo del Hospital de los Angeles, California), el Dr. Rudolf W: Hynek (de la Academia de medicina de Praga)... todos coinciden en afirmar que la representación de las heridas es anatómicamente perfecta y con detalles desconocidos en la Edad Media. Por ejemplo, el halo de suero alrededor de las manchas de sangre -no visible a simple vista; salpicaduras y sinuosidades de los regueros sanguíneos, el hinchazópico de la asfixia- etc...
La Sábana Santa revela datos desconocidos en tiempos medievales. En el siglo XIV, la iconografía tenía un ínfimo desarrollo del realismo anatómico. Además todas las imágenes de la época demuestran que se desconocían los elementos históricos y arqueológicos sobre la flagelación y la crucifixión según se hacía en el siglo I. Sin embargo se ha podido demostrar que la Sábana Santa no sigue la iconografía medieval sino que muestra estos elementos con suma precisión tal como corresponden al tiempo de Cristo.
Para lograr una semblanza perfecta, como la impresa en el lienzo, en caso de que la Sábana Santa fuera medieval, se requeriría que se martirizara a una víctima, la sometiera en vida a setecientas heridas y que una vez muerta, le traspasaran el corazón con una lanza.
Pero además se requeriría que la víctima tuviera un rostro perfectamente afín con las decenas de iconos de Cristo difundidos en el arte bizantino desde el siglo VI. La afinidad del rostro de la Sábana Santa y los antiguos iconos ha sido documentada por Giovanni Tamburelli en el año 1989, quien encontró muchos puntos de congruencia de tal manera que habría que pensar que la faz del lienzo fue el prototipo para la iconografía cristiana primitiva (en cuanto a las características del rostro. Ya hemos visto que no pudieron copiar los detalles anatómicos).
El tejido del lienzo, envolvió un auténtico cadáver durante un período de 30 a 36 horas, como lo demuestran las setecientas heridas pequeñas y grandes calcadas sobre el lino por contacto. Exámenes minuciosos conducidos por médicos han asegurado además que se trata de una perfecta imagen de un cuerpo humano, torturado por la corona de espinas, azotes, la cruz, traspasado por la lanza... Los efectos naturales de esos tormentos sobre un cuerpo humano están claramente manifiestos de tal forma que sería imposible de imitar y menos sin las técnicas modernas.
Está científicamente reconocido por todos los expertos de todas las tendencias que, independientemente de que la Sábana haya sido o no utilizada para envolver el cuerpo de Cristo en el siglo I, se trata de un caso arqueológico único en el mundo. Hoy día el lienzo es estudiado por treinta disciplinas diferentes.
La teoría que explica mejor el origen de la imagen es la de una radiación no penetrante que se atenúa al pasar el aire y que disminuye con la distancia. En la tela, tratada con áloe y mirra, se imprimieron los rasgos del cuerpo como si se tratara de una plancha fotográfica. Esto explica su carácter tri-dimensional.
La radiación sobrenatural del momento de la resurrección puede ser la causa misteriosa de la impresión de la imagen del cuerpo en el lienzo. En ese caso se trata de la verdadera imagen de Cristo en el momento preciso que su cuerpo va a resucitar. Semejante radiación explicaría la dificultad de los científicos en descubrir su origen, ya que se trata de algo sobrenatural. También explica el fallido resultado de la prueba de carbono ya que esta no tomó en cuenta los efectos de la radiación en el lienzo.

viernes, 22 de enero de 2016

¿Qué es?
También llamada Síndone o Santo Sudario es, según una constante tradición y como parecen verificar los numerosísimos estudios que se han llevado a cabo sobre el tema, el lienzo o sábana de la cual nos hablan los evangelios: la sábana nueva y limpia en la cual José de Arimatea, con ayuda de Nicodemo, envolvió el cuerpo de Jesús tras su muerte en la cruz [Mt 27, 57ss; Mc 15, 42ss; Lc 23, 50ss; Lc 24, 12ss; Jn 19, 38ss; Jn 20, 5ss].
Es una gran pieza de lino de 4'41 m de largo y 1'13 m de ancho (después de la restauración del año 2002), amarillenta, raída, sucia, manchada de sangre y quemada. Actualmente se encuentra en la catedral de San Juan Bautista de Turín (Italia).


¿Cómo conocemos esto?
1. QUEMADURAS: Producidas por el calor irradiado de las aristas de metal en la urna que contenía la Síndone la noche del incendio en la capilla de Chambéry, el 3 de diciembre de 1532. Y los 16 triángulos de color blanquecino son los agujeros producidos en la carbonización total de una esquina: la urna había empezado a derretirse y una gota alcanzó el ángulo de aquel pliegue, pues la Síndone estaba plegada varias veces (estos agujeros estaban ocultos por unos remiendos, cosidos poco después del incendio, y que han sido eliminados tras la restauración de la Síndone en Junio de 2001). También esa gota produjo los cuatro agujeritos que se ven en ringlera transversalmente, con sus correspondientes rombos de chamuscamiento, en la mitad exacta del lienzo.
2. AGUA: Empleada para la extinción del incendio de 1532 y enfriamiento de la urna de plata que la contenía y que estaba empezando a derretirse. El agua empapó casi toda la Síndone excepto las zonas marcadas.
3. CUERPO ENTERO: Doble imagen de un cuerpo varonil ya cadáver, frontal y dorsal.
4. AZOTES: Son las huellas dejadas por la flagelación.
5. ESPINAS: Impresiones directas de la sangre ocasionada por un casco de espinas.
6. CLAVOS DE LAS MANOS: Sangre de la herida en la muñeca izquierda.
7. SANGRE: Reguerillo de sangre del antebrazo derecho e izquierdo, que proviene de la muñeca.
8. LANZADA: Sangre que ha brotado a dos tiempos de la herida del costado. La sangre provenía de la aurícula derecha y de la vena cava superior.
9. DESCENDIMIENTO: Sangre que brotó durante el descendimiento del cuerpo de la cruz.
10. CLAVOS DE LOS PIES: Sangre de las llagas de los pies traspasados por un solo clavo.
11. PATÍBULUM: El traslado del madero transversal por el reo ha magullado, aplastado y deformado lesiones anteriores.
12. RODILLAS: Contusiones en las rodillas.
¿Es Jesús?
Ahora tomemos en consideración las siete características más significativas comunes a Jesús de Nazaret (según el relato evangélico) y al hombre de la Síndone, y veamos cuántas son las probabilidades de que tales características se encuentren reunidas contemporáneamente sobre un mismo hombre que haya sufrido el suplicio de la crucifixión.
1. Tanto Jesús como el hombre de la Síndone han sido envueltos en un lienzo fúnebre tras la muerte por crucifixión. Es sabido que no muchos crucificados pueden haber tenido una sepultura en regla (era el suplicio más ingominioso reservado a los esclavos, bandidos, asesinos y continuaba después de la muerte en el desprecio al cadáver): una probabilidad sobre cien (1/100).
2. Tanto a Jesús como al hombre de la Síndone se le ha puesto en la cabeza un casco de espinas. Ningún documento histórico recuerda una costumbre como ésta. Limitamos esta lejanísima probabilidad a una sobre cinco mil (1/5000).
3. El patibulum ha gravado pesadamente las espaldas del hombre de la Síndone, como las de Jesús. Sólo a veces el condenado debía llevar el palo horizontal de la cruz hasta el lugar de ejecución: una probabilidad sobre dos (1/2).
4. La misma probabilidad (1/2) para cómo quedan fijadas las manos y los pies al madero de la cruz. Se podían fijar con clavos o mediante una más simple y rápida atadura con sogas.
5. El lienzo sindónico revela una herida en el costado derecho del hombre que ha envuelto. El evangelio de Juan (19, 33-34) narra que a Jesús "... no le quebraron las piernas, pero soldado le abrió el costado con su lanza, y al punto salió sangre y agua". Quizás una probabilidad sobre diez (1/10).
6. El hombre de la Síndone ha sido envuelto en un lienzo apenas bajado de la cruz, sin que se le realizara ninguna operación de lavado y unción del cadáver; lo mismo sucedió con Jesús, puesto que estaba por llegar la Pascua judía durante la cual no se podía realizar ningún trabajo manual: una probabilidad sobre veinte (1/20).
7. La Síndone lleva la impronta del cadáver de un hombre, pero no restos de descomposición. Por tanto, ha envuelto un cuerpo humano durante un período breve, y sin embargo suficiente para que se imprimiese una huella. Y el cadáver de Jesús descansó en el sepulcro durante poco más de 30 horas, desde la tarde del viernes hasta el amanecer del domingo. Es una coincidencia extraordinaria que autoriza a considerarla como una probabilidad sobre quinientas (1/500).

jueves, 14 de enero de 2016

"Muchos profesionales de los medios de comunicación están ubicados en áreas urbanas aisladas, sin tomar contacto directo con sus problemas. Viven y reflexionan desde la comodidad de un desarrollo y de una calidad de vida que no están al alcance de la mayoría."
.JESÚS DE NAZARET.
 
Los Evangelios. Autores, fechas y destinatarios.
 
El Nuevo Testamento es la fe literaria de la Buena Nueva de Cristo y agrupa los cuatro Evangelios, las cartas de los apóstoles a las primeras comunidades cristianas y el Apocalipsis. Los textos principales son los cuatro Evangelios de Marcos, Mateo, Lucas y Juan que narran
La moderna crítica literaria aplicada por los exégetas de la Iglesia Católica ha permitido profundizar enormemente en las cuestiones sobre los Evangelios. Las herramientas de las que disponemos son la crítica científica: crítica de las fuentes, crítica de la forma literaria, crítica redaccional y crítica de las tradiciones. A continuación se exponen las conclusiones estudiadas hoy en día en las facultades de teología.
 
Los Evangelios "Sinópticos"
Se conocen como "Evangelios Sinópticos" los de Marcos, Mateo y Lucas porque tienen el mismo esquema y parten de una triple tradición común: la famosa "Fuente Q" que narraba la predicación de Jesús pero no incluía la Pasión, las tradiciones orales de los testigos y los logia o colecciones de escritos sobre las palabras de Jesús. Ambas fuentes se perdieron, desgraciadamente para nosotros.
Evangelio de Marcos
Autor: Marcos es, probablemente, el secretario de Pedro, y escribió su evangelio basándose en los relatos de los discípulos (principalmente de Pedro), ya que él no fue testigo presencial de los hechos que narra. Marcos narra en su evangelio que un joven cubierto con una sábana siguió a Jesús tras ser apresado. ¿Es este joven el propio Marcos? Muchos así lo ven.
Fecha, idioma y lugar: Marcos escribió su evangelio, el primero de los sinópticos, hacia el año 50-60. El idioma utilizado fue el griego. Desde Clemente de Alejandría es tradición situar el lugar de composición en Roma.
Destinatarios: Marcos escribió para cristianos provenientes del mundo pagano, por lo que no presta demasiado interés a las cuestiones de la Ley Mosaica, que no interesan a sus lectores y sí pone cuidado en explicar las costumbres judías, que sus lectores desconocen y por ello precisan de una explicación.
Fuentes: Marcos debió escribir su evangelio basándose en relatos de los Apóstoles y testigos presenciales de los hechos que describe. Además, según una tradición antigua, se apoyó en material de primera mano que circulaba desde la muerte de Jesús y que contenía las enseñanzas de Cristo y sus palabras: la tradición oral de los testigos y los famosos logia.
Comentario: Marcos escribió en griego, ya que por entonces el pueblo judío en su mayoría prácticamente había vuelto la espalda a la Buena Nueva, por lo que la Iglesia se abría a los gentiles con mayor vigor. Por ello pone especial atención al rechazo que los judíos radicales sentían por Jesús. Su evangelio es el menos sistemático y de más pobre estilo literario ya que está redactado en estilo coloquial. Utiliza mucho el presente histórico y su vocabulario es reducido y muy espontáneo.
 
Evangelio de Mateo
Autor: Mateo es, probablemente, el publicano (recaudador de impuestos) al que Jesús llamó para formar parte de los doce apóstoles, por lo que es testigo directo de los hechos que narra. También es llamado en los Evangelios con el nombre de Leví. Probablemente fue un judío helenizado
Fecha, idioma y lugar: Mateo escribió su evangelio en su forma primitiva hacia los años 60-70 y su redacción definitiva se hizo hacia el año 80, probablemente por un discípulo. El idioma empleado fue el arameo, la lengua utilizada por los judíos que vivían en Palestina. Se piensa que probablemente fue escrito en Siria, donde había mayor número de judíos cristianizados.
Destinatarios: Los judíos cristianizados, por lo que no explica las costumbres judías que sus lectores se sabían de memoria ni traduce los vocablos hebreos. Además hay varias referencias al Antiguo Testamento y a la Ley Mosaica.
Fuentes: Mateo tomó el 50% del material de su evangelio de Marcos y la parte restante de la Fuente Q y de los logia y las tradiciones orales. El relato de la infancia de Jesús no aparece en la Fuente Q ni en Marcos, por lo que Mateo tuvo aquí, y en otras partes de su evangelio, una fuente desconocida.
Comentario: Mateo escribió en arameo, la lengua que utilizaban los judíos, porque es un evangelio destinado al pueblo de Israel. Sus escritos complementan y abarcan más que los de su predecesor Marcos, pero siguen el mismo esquema. Aproximadamente Mateo tomó la mitad del material de Marcos abreviando la narrativa. Y el 25% de su evangelio coincide casi exactamente con el de Lucas, precisamente en las palabras de Jesús ya que ambos utilizan la Fuente Q. Es un evangelio construido de manera sistemática y ordenada, con una estructura basada en cinco bloques o discursos con un claro interés didáctico y teológico que se muestra en el interés de Mateo por la doctrina de Jesús
 
Evangelio de Lucas
Autor: Lucas es, probablemente, el médico sirio que cita Pablo y que acompañó al Apóstol en su viaje a Roma. Lucas escribió su evangelio conjuntamente con los Hechos de los Apóstoles que primitivamente formaban una obra única. No es testigo presencial de lo que narra en su evangelio pero sí de lo que narra en los Hechos. En Roma Lucas se encontró con Pedro y fue testigo de la evangelización de los dos Apóstoles en la Urbe. Es el único de los cuatro evangelistas que no es judío.
Fecha, idioma y lugar: Lucas escribió su evangelio, el tercero de los sinópticos, alrededor del año 70-80. El idioma utilizado fue también el griego. Lo que está claro es que Lucas escribió fuera de Palestina, probablemente en Grecia.
Destinatarios: cristianos provenientes del paganismo (griegos y romanos).
Fuentes: Lucas utiliza el 70% del material de Marcos y dispone de fuentes propias, exclusivas, además de la Fuente Q, de las tradiciones orales y de los logia. así, para componer su relato de la infancia de Jesús, probablemente la fuente fuera la misma virgen María, como parece intuírse leyendo el texto. Los estudiosos llaman a esta fuente original de Lucas "Fuente L" y probablemente sea la fuente más antigua de todas las involucradas en la composición de los Evangelios, aunque no sabemos si se trató de una fuente oral o escrita.
Comentario: Lucas es un magnífico escritor de atractiva personalidad que fue recopilando meticulosamente todas las tradiciones orales que le llegaron a los oídos. Aunque utiliza las mismas fuentes que Marcos y Mateo, las enriquece con aportaciones como el relato de la infancia de Jesús que, según se supone al leerlo, la misma Virgen María debió contarle. Como no era judío, no presta la misma atención que Mateo y Marcos a los temas de la Ley mosaica y sí lo hace al papel de la mujer en el Evangelio y a la necesidad de la pobreza de medios para alcanzar la riqueza espiritual.   Su estilo es el mejor de los Sinópticos, con un vocabulario muy rico. Lucas retoca las fuentes de Marcos y Mateo para evitar expresiones que puedan ser malinterpretadas y pone especial hincapié en el amor de Cristo a los desheredados. Lucas escribió también el libro de los Hechos de los Apóstoles que primitivamente se publicó como parte integrante de su evangelio y que narra la historia de la Iglesia desde la bajada del Espíritu Santo en Pentecostés hasta la llegada de Pablo a Roma y que estudiaremos en el siguiente capítulo.
 
Evangelio de Juan
El cuarto evangelio es el de Juan, que no sigue el esquema de los Sinópticos y dispone de fuentes propias.
Autor: Juan Zebedeo, el más joven discípulo al que Jesús cariñosamente apodaba "el hijo del trueno".
Fecha, idioma y lugar: Juan escribió su Evangelio después del año 95. El idioma utilizado fue también el griego. El lugar parece claro: la isla de Patmos a la que el apóstol había sido desterrado por Domiciano.
Destinatarios: Los cristianos de origen heleno perseguidos por Roma.
Fuentes: Todo su evangelio es un compendio de su vivencia al lado de Cristo, por lo que sólo necesitó fuentes para el inicio de la obra.
Comentario: El evangelio de Juan, un "cuerpo extraño" si se compara con los Sinópticos, es un evangelio mediatizado por la terrible situación que vive la Iglesia en aquellos sangrientos días. Es el que cuenta con mayor número de detalles precisos sobre las enseñanzas de Cristo y el que utiliza un lenguaje más refinado. Precisamente es el lenguaje utilizado una de las claves del evangelio de Juan. Un evangelio muy crudo, una obra muy compleja que aún suscita interminables e interesantísimos debates. El final del texto aclara que la redacción definitiva fue obra de discípulos de Juan. Además del evangelio, Juan escribió su famoso Apocalipsis, una obra literaria que ha cautivado los corazones de generaciones enteras por su estilo. El Apocalipsis muestra a una Iglesia perseguida en medio de un mar de sangre constituido por las terribles guerras que habían azotado Tierra Santa. Una Iglesia que vencerá gracias a Cristo resucitado que se impondrá al mal y que traerá el Reino a todos los hombres de buena voluntad. Toda una maravilla para pasarse horas y horas extasiándose en su lectura.
 
LOS SÍMBOLOS DE LOS CUATRO EVANGELISTAS
- ¿ Por qué a los cuatro evangelistas se les representan como a un ángel, un león, un buey y un águila?


Tradicionalmente se suele representar a los cuatro evangelistas mediante cuatro símbolos.

El orden en el que aparecen en el Nuevo Testamento son:

El ángel (un hombre con alas): Mateo.

El león: Marcos.

El buey: Lucas.

El águila: Juan.

- Mateo se simbolizó con un ángel (un hombre con alas) porque su evangelio comienza con la lista de los antepasados de Jesús, el Mesías: Mt 1,1-16. Esta lista es de gran valor para este evangelio porque presenta a Jesús como hijo de David (el más importante de los reyes) e hijo de Abrahán (el padre del pueblo de Dios). Mateo quiere afirmar que Jesús lleva a su perfección la historia del pueblo. Esta lista de mensajes tiene tres períodos de generaciones (3=número perfecto), y cada uno de los períodos se compone de catorce generaciones (14=7+7, número perfecto). Las mujeres también juegan un papel importante en esta genealogía; se trata de Tamar, Rajab, la mujer de Urías (Betsabé) y María. Son mujeres comprometidas con la justicia. Por eso Mateo las incluye en la lista.

- Marcos se simboliza con un león porque su evangelio comienza con la predicación del Bautista en el desierto, donde había animales salvajes. Su evangelio fue el primero en escribirse (en la década de los años 60 después de Cristo) y sirvió como texto de catequesis para los que se preparaban para recibir el bautismo. Es el evangelio más corto y el hecho de que comience presentando a Juan Bautista en el desierto es muy importante. Para el pueblo de la Biblia, el desierto representaba, entre otras cosas, el lugar donde se fraguan los nuevos proyectos. Esto es lo que hizo el pueblo de Dios cuando salió de la esclavitud de Egipto. Juan Bautista se da a conocer en el desierto, lo que pone de manifiesto que está preparando al pueblo para la gran novedad que supone la vida y las prácticas de liberación de Jesús. Partiendo de Am 3,8, podemos afirmar que la voz del león simboliza la voz de los profetas que denuncian la violación de los planes de Dios Ap 10,3. Por tanto, Juan Bautista es el profeta que denuncia la injusticia y que apunta a la novedad que aportará Jesús.

- Lucas se ha simbolizado mediante un buey o un toro porque su evangelio comienza con la visión de Zacarías en el Templo, donde se sacrificaban animales como bueyes, terneros y ovejas. El evangelio de Lucas comienza y termina en el Templo; los Hechos de los apóstoles constituyen la segunda parte del evangelio de Lucas. Si en el evangelio encontramos el camino de Jesús, en los Hechos tenemos el camino de las comunidades que siguieron a Jesús. El libro de los Hechos termina llegando Pablo a Roma, ciudad que, para Lucas, representa "los confines del mundo".

- Juan es representado por un águila, la mirada dirigida al sol, porque su evangelio se abre con la contemplación del Jesús-Dios: Jn 1,1. El evangelio de Juan fue el último en aparecer, y no se escribió en pocos días. Lo escribieron los discípulos de Juan. Una de las características del Jesús del evangelio de Juan es esta: el Maestro nos conoce a cada uno de nosotros mejor de lo que nos conocemos nosotros mismos: Jn 1,48. Poco más adelante dice que Jesús "no necesitaba que le informasen de nadie, pues él conocía muy bien el interior del hombre." (Jn 2,25). Los símbolos de cuatro evangelistas surgieron a partir de Ez 1,10. En Ap 4,6-10 hay cuatro vivientes con ese aspecto, pero no se refieren a los evangelistas.